La Escuela de Formación de Cáritas Diocesana de Cádiz continúa con su actividad formativa

La Escuela de Formación de Cáritas Diocesana de Cádiz, una vez inmersos en la nueva normalidad, ha retomado la formación de sus participantes y agentes voluntarios y contratados, con un modelo mixto, presencial – online, desde la certeza que la formación es un elemento fundamental en el ser y el hacer de Cáritas.

Durante el tiempo que ha durado el estado de alarma, que finalizó el pasado mes de junio, el equipo que compone la Escuela de Formación, ha ofrecido acciones formativas de manera renovada y adaptadas a la nueva situación que estamos viviendo sin dejar de acompañar a ninguno de los agentes de Cáritas a los que presta servicio: personas en situación de exclusión y/o vulnerabilidad social, agentes voluntarios y personal contratado.

Igualmente, hemos acompañado a aquellas personas que nos han sido derivadas desde nuestros servicios de Orientación Laboral, hemos mantenido el contacto con todos ellos, hemos reforzado las materias de las acciones formativas que teníamos en marcha y que fueron aplazadas durante el estado de alarma y garantizado una tutorización personalizada a cada uno de ellos. En concreto, esta atención se ha realizado con el alumnado de un Taller Prelaboral en Cádiz, de dos Cursos de Formación Ocupacional de Operaciones Básicas de Pisos para todo el territorio diocesano y de un Curso de Atención Sociosanitaria conducente a certificado de profesionalidad en Alcalá de los Gazules.

La nueva normalidad, donde la formación telemática mantiene un papel importante para la prevención del contagio, nos ha llevado a procurar formación en el uso de las nuevas tecnologías, disminuyendo de este modo la brecha digital de los alumnos. En este momento, nuestros alumnos/as participantes en acciones formativas para el empleo, comienzan, en los próximos días, a acudir a las empresas a realizar sus prácticas formativas cumpliendo con todas las medidas de seguridad e higiene obligatorias. Para ello, contamos con convenios de colaboración con empresas de la familia profesional de la hostelería y los cuidados a personas tales como el Hotel Mercure, Hotel Alborán y Hotel Aura de Algeciras, Hotel Alborán en Chiclana, Hostal Cafetería el Mero en Los caños de Meca y el Hotel Fairplay de Benalup – Casas Viejas. Próximamente, dará comienzo un segundo curso de atención Sociosanitaria online, Prácticas Formativas no Laborales en empresas y Formación en el Puesto de Trabajo de Grandes Almacenes.

Todas estas acciones formativas están financiadas por el Programa Operativo de Economía Social e Inclusión SocialInditex, la asignación tributaria del 0,7 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía y fondos propios de Cáritas.

En cuanto a los agentes voluntarios, hemos adaptado la formación a las nuevas tecnologías, trabajando a través de sesiones online en distintas plataformas, aulas virtuales e incluso a través de aplicaciones de mensajería instantánea (WhatsApp), siendo estas nuevas experiencias muy enriquecedoras y novedosas para todos y teniendo una gran aceptación, gracias a la posibilidad de llegar a muchas personas. La formación ofrecida al voluntariado ha tenido como temática la COVID-19 enfocada, principalmente, a la acción de nuestro voluntariado durante y después del estado de alarma, así como formación básica de qué es Cáritas, orientada, en este caso, a aquellas personas que se han incorporado como voluntarios a Cáritas durante este tiempo. Finalmente, los voluntarios que se han incorporado al Comedor Padre Cruceyra de Algeciras han obtenido el carnet de manipulador de alimentos, imprescindible para el ejercicio de sus funciones en este proyecto.

Respecto a los agentes contratados, todo el equipo profesional ha tenido la oportunidad de reciclar su formación en prevención de riesgos laborales. Asimismo, se ha participado en la Escuela de Verano online de Cáritas Española, avanzando y profundizando en materias necesarias e imprescindibles para el buen desarrollo del trabajo sociocaritativo, así como en conocimientos que mejoran la atención de los más desfavorecidos y afectados por la crisis socio sanitaria y en el acompañamiento a los agentes voluntarios que están haciendo frente a la misma».

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