Mañana, miércoles 30 de septiembre, celebraremos a la co patrona de las misiones, santa Teresita del Niño Jesús o de Lisieux, dando comienzo al mes misionero por excelencia: Octubre.
Este año será diferente. La costumbre, en la Diócesis de Cádiz y Ceuta, es hacerlo en uno de los dos monasterios de las Hermanas Carmelitas Descalzas, como Secretariado diocesano. Un año en Cádiz y otro año en San Fernando. Pero al estar cerrado el Monasterio de la Santísima Trinidad se ha optado por llevarlo a cabo en una parroquia.
De esta manera, será en la Parroquia de «El Buen Pastor», de la Congregación de los Sagrados Corazones, a las 19.30 horas, en San Fernando.
Al final de la Eucaristía, se bendecirán rosas que serán repartidas entre los asistentes. Sintiéndolo mucho, solo podrán asistir 60 personas, que es el aforo máximo del templo.
Santa Teresita del Niño Jesús o de Lisieux, la Patrona de las Misiones descubrió, con apenas 15 años, que podía ser misionera haciéndose carmelita, orando por la salvación de los hombres. Nuestra mentalidad moderna se rebela: “¿Misionera encerrada en un convento? ¿Salvación eterna? Lo que los hombres necesitan es ser salvados aquí: comer, ser curados…”. Los misioneros conocen las necesidades de los pobres, sobre todo, porque las comparten con ellos. Cambian la vida de muchos hombres y mujeres con obras pero también con el anuncio del Evangelio. Durante octubre la Iglesia celebra el mes de las Misiones y nos invita de una manera particular a ayudar a la misión evangelizadora de la Iglesia con la oración como hizo Santa Teresa de Lisieux.
También, rezaremos con las Hermanas, a pesar de la separación física a la que nos tiene sometida esta pandemia. Ya que, aunque de manera virtual, nos uniremos a su rezo de Vísperas por los misioneros, hoy martes, 29 de septiembre, a las 19.30 horas.
