El obispo de Cádiz y Ceuta, Mons. Rafael Zornoza, se ha reunido hoy, 8 de octubre, con los miembros de la Curia Diocesana y trabajadores del Obispado en un inicio oficial del curso en el que ha expuesto las líneas generales de trabajo para los próximos meses.
Este encuentro, que ha dado inicio de manera oficial al curso en el Obispado de Cádiz y Ceuta, ha tenido lugar en el patio de Hospital de Mujeres para poder mantener la distancia de seguridad y las medidas de prevención de la Covid-19.
Mons. Zornoza ha comenzado agradeciendo el trabajo y el esfuerzo de todo el personal del Obispado durante los meses de confinamiento y ahora que todavía continúa la pandemia. “Agradezco vuestra entrega en estos momentos tan complicados. Con vuestro servicio hemos dado un testimonio cristiano sencillo, pero de un trabajo competente y disponible, con la habitual caridad con la que hay que atender a las personas”.
El obispo diocesano ha manifestado que “es un momento providencial porque con todo esto se renueva el deseo de la Iglesia de hacerse presente en el mundo, de acudir a los demás y de que aportemos lo mejor de nosotros mismos en favor del bien común”.
Así, se ha hecho un repaso de lo que fue el curso pasado, marcado por la pandemia, y en el que destacó la Asamblea de Laicos en Madrid. Precisamente, para este curso que comienza ha quedado pendiente una reunión para tratar las conclusiones de esa asamblea.
Además, también fue importante la preparación de un nuevo plan pastoral para las parroquias, la apertura de la oficina para los casos de abusos, con la consiguiente publicación del protocolo de prevención. De la misma manera, el obispo diocesano ha destacado la labor de Cáritas Diocesana en estos momentos de pandemia en los que ha tenido que redoblar esfuerzos. Igualmente destacable ha sido la consolidación de los retiros de Emaús y del Instituto Diocesano de Teología, entre otros asuntos.
En lo que respecta al curso 2020-21, Mons. Zornoza ha afirmado que lo hemos comenzado con la alegría de las nuevas ordenaciones de presbíteros y con nuevas incorporaciones en el Seminario San Bartolomé y en el Seminario Misionero Redemptoris Mater. De la misma manera, ha anunciado la llegada de dos nuevas órdenes religiosas a la diócesis. Por un lado, los Misioneros Siervos de la Palabra, en la localidad del Tesorillo, y los Misioneros Scalabrinianos, en Algeciras.
Por otro lado, D. Rafael Zornoza ha explicado brevemente el contenido de su carta pastoral para este curso, en el que, como el mismo ha asegurado, “se ha programado todo como si no hubiese pandemia, pero conscientes de que se tengan que hacer cambios sobre la marcha debido a las limitaciones que puedan ir surgiendo”. En cuanto a fechas importantes, la carta recoge la Asamblea Diocesana programada para el próximo 24 de octubre, completando el trabajo anterior y abriendo horizontes pastorales para la diócesis, así como la continuidad de los trabajos de los Consejos Parroquiales para conformar el próximo Plan Diocesano de Pastoral.
Mons. Zornoza ha subrayado la importancia de la continua formación, especialmente para los sacerdotes, y la labor de caridad insustituible en la vida de la Iglesia para que en una época de crisis socioeconómica como la que ya estamos padeciendo “estemos también nosotros pendientes de los necesitados presentes y futuros, con especial atención a Cáritas, donde la Iglesia diocesana se desvive por cuantos necesitan nuestra ayuda”.
Con todo, el acto de apertura de curso ha finalizado con una oración compartida por todos los presentes y en la que el obispo diocesano ha reiterado su agradecimiento a la labor de todos los trabajadores y voluntarios.
