El pasado sábado se celebraba la segunda sesión de la Escuela de Evangelizadores con el tema del «Acompañamiento» a tratar. Numerosos fieles de la diócesis, sacerdotes, consagradas y delegados diocesanos, asistieron al encuentro para trabajar sobre la importancia de ser acompañados para crecer en la fe. Monseñor Rafael Zornoza junto a Gabriel Rubio -con su experiencia particular- iniciaron una mesa redonda donde debatieron sobre el acompañamiento y respondieron a las preguntas de los asistentes.
El obispo diocesano pidió en la eucaristía, la intercesión de San José «Para que seamos capaces de vivir esta misión, este rasgo de la evangelización. No hay evangelización sin evangelizadores».
Decía Mons. Zornoza que el acompañamiento lo tienen que practicar jóvenes, padres, catequistas y toda persona de fe unida a la Iglesia, mientras que la dirección espiritual es más íntima y la dirige un sacerdote. Gabriel Rubio mencionó que la dirección espiritual: «Es quien me dirige espiritualmente, me acompaña, reza por mí, intercede por mí incluso profundiza en mi intimidad. La obediencia es la clave para llevar a buen término una dirección espiritual, para así hacer la voluntad de Dios»
La jornada finalizó con la sesión de la tarde en grupos de trabajo donde reflexionaron sobre el acompañamiento, las Redes Sociales y la colonización ideológica. Tras este momento, hubo una Hora Santa con la exposición del Santísimo.
